¿Quién no ha soñado alguna vez con ser millonario? Yo cambiaría de coche y viajaría a Islandia.
Algunos dejarían de trabajar, otros trabajarían de voluntarios en una ONG, muchos se irían a vivir a Canarias...
Bien, pues a un joven madrileño el sueño de ser millonario se le cumplió por unos instantes. Un amigo de nuestro protagonista, trabajador de Cajamadrid, le llamó por teléfono una buena mañana y le preguntó:
-¿Quieres ser millonario? Pues mira tu cuenta de ahorros.
Así es que, incrédulo, bajó al cajero, actualizó su libreta y comprobó que su amigo le había transferido un millón de euros de Cajamadrid a su cuenta privada. Tras la sorpresa, el trabajador gamberro de Cajamadrid, volvió a retirar el dinero de la cuenta de su amigo, aunque el caso ha trascendido a los medios de comunicación.
Yo tengo un amigo que trabaja en una carnicería: ¡tal vez le convenza de que me transfiera unos chorizos a mi nevera!
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